Por: Jhon Jairo Berrío López – Representante a la Cámara.

Si bien sobre este virus se ha escrito mucho, el día de hoy me quiero referir a la necesidad y responsabilidad que tenemos todos para ayudar a bajar el nivel de ansiedad que está ocasionando en nuestro país, considero que a pesar de que son varias las campañas sobre el Coronavirus, es trascendental e inevitable diseñar estrategias para ayudar a disminuir el pánico, el miedo y el estrés que se ha generado alrededor de esta enfermedad.

Ahora que el COVID-19 llegó a Colombia, se hace necesario mantener la calma y tener claro que la tasa de mortalidad del virus es baja, que se han definidos protocolos no solo en las entidades de salud, sino también en migración Colombia y en las entidades públicas del país, protocolos y medidas preventivas que ayudan a mitigar los riesgos de infección.

Es importante entender que este virus ya existente en nuestro país, así como llegaron otros en su momento, será atendido de la manera adecuada, creamos en la institucionalidad pero lo más importante es comprender que en medio de este pánico que se ha generado podemos ver este caso como una oportunidad para que cada uno mejore el autocuidado, incremente el lavado de manos de forma adecuada y permanente, las empresas privadas, centros comerciales y escuelas tengan las instrucciones de los 5 pasos para un correcto lavado de manos en cada uno de sus baños, después de utilizar el metro y el servicio público limpiarnos con alcohol o gel, estornudar en el codo y solo en caso de ya tener gripe utilizar tapabocas.

Teniendo en cuenta que las investigaciones realizadas hasta ahora no han arrojado aun un tratamiento asertivo y eficaz para resolver de forma científica este cuadro clínico, es necesario no solo incrementar las campañas de autocuidado, preparar espacios telefónicos para la atención de sospecha de casos y dar a conocer los protocolos, sino también, realizar acciones desde la salud mental para lograr estabilizar la población colombiana y mitigar la crisis o pánico que se ha generado por el exceso de información; se podría decir que el país está viviendo además de una epidemia como es el Coronavirus, una epidemia de información en altas proporciones errada (Infodemia).

Es claro que cuando se tiene un elevado grado de estrés y ansiedad nuestras defensas bajan, lo que genera que seamos más propensos a la afectación de una gripe, algún virus o bacteria, por ello, es indispensable adelantar campañas e intervenciones por sectores, barrios, veredas, comunidades estudiantiles, entre otros, generando estrategias de acercamiento desde las pautas de estabilización, el equilibrio emocional, la introyección e introspección para evitar el desbordamiento de crisis y generar espacios de aprendizaje asertivos con respecto a esta temática.

De igual manera se debe establecer el llamado a las autoridades de Salud, a las gobernaciones, alcaldías y el Estado en general, para mantener campañas de autocuidado y limpieza no solo para este tipo de crisis sino también para disminuir otras epidemias como lo son el dengue, la malaria, VIH y otras más.