En su discurso ante la Asamblea de la Federación Nacional de Ganaderos, Fedegan, el expresidente Álvaro Uribe advirtió que la pandemia ha castigado la economía en Colombia. El endeudamiento del Gobierno Central que en los últimos años estaba cercano al 50% del PIB, terminará este 2020 por encima del 60%, el decrecimiento del Producto Interno Bruto rondará alrededor del 7%, el déficit fiscal estará por encima del 8%, el desempleo por el 15.5% y hoy los hogares colombianos han perdido $25 billones en capacidad adquisitiva.

En concepto del expresidente el país deberá apelar a fórmulas como un incremento moderado de los impuestos para equilibrar el faltante fiscal. En sus palabras, “Es mejor hacerlo ya que diferirlo al debate electoral con el riesgo de la demagogia que dinamiza el odio y el peligro de los silencios que no se comprometen, pero que al final hacen el juego a la izquierda socialista. Hacerlo ya da tranquilidad a los empresarios, aplazarlo genera incertidumbre”.

El esfuerzo fiscal de los colombianos debe tener como contraprestación la reducción del número de congresistas y la disminución en su salario, así mismo los gastos del Estado en funcionamiento y nómina solo deberán crecer el porcentaje de la inflación durante los próximos seis años.

En su discurso también aseguró que ve inviable la propuesta de trabajar por horas y por días en un país como Colombia y en cambio pide fomentar una estrategia como el teletrabajo para reducir costos y crear conciencia en el resultado de la labor más que en los horarios, también disminuir la jornada de trabajo de 48 a 42 horas semanales sin afectar el ingreso.

El líder del Centro Democrático también se refirió al empleo entre los más jóvenes, “cualquier colombiano menor de 30 años que no haya tenido un empleo formal pueda ser aprendiz hasta por 2 años y no como ocurre que hoy que solo pueden ser aprendices los estudiantes del Sena y universidades.”

Uribe Vélez insiste en la necesidad de reformar la JEP y que los miembros de las Fuerzas Armadas no sean investigados por esa jurisdicción. Al respecto aseguró, “¡Qué error tan doloroso que en La Habana hubieran puesto en pie de igualdad al terrorismo con nuestras Fuerzas Armadas, que han sido democráticas, respetuosas del orden Constitucional, con severas sanciones a los integrantes que han violado la ley!”. El expresidente ratificó que mantener en el Congreso o en cualquier cargo de representación a los representantes de delitos atroces es una afrenta a la democracia.

De acuerdo con el expresidente el sector agropecuario necesita seguridad jurídica sobre la tierra, en especial poseedores y explotadores de buena fe que tienen el riesgo de restitución hasta el año 2031, de igual manera las Zonas de Desarrollo Agropecuario deberían estar acompañadas desde su reglamentación con la posibilidad de que campesinos, tecnólogos y profesionales puedan adquirirlas siempre y cuando presenten proyectos productivos.

Finalmente, pidió al país estar atentos a las elecciones de 2022, “Enfrentamos el riesgo de la extrema izquierda socialista y de las mentalidades permisivas que les hacen el juego. Estas opciones expropian la iniciativa privada o la asfixian con impuestos y regulaciones hostiles. En ambos casos dejan sin posibilidades a los pobres que dicen defender, como en Venezuela que pasaron la pobreza del 40% al 86%. Y lo peor es el olimpismo de algunas personalidades democráticas que subestiman estos riesgos”, y agregó que, Colombia debe pensar en el Referendo, el cual contiene la agenda con las pautas para sacar adelante al país.