Respaldamos el derecho del Estado de Israel de defender a su población, sus símbolos y sus templos religiosos (sinagogas) contra el terrorismo. Una cosa es criticar un Estado o a su gobierno y otra muy distinta el lanzamiento terrorista de más de 2000 cohetes.

Todos los Estados y los pueblos tienen derecho a su tranquilidad y también a que se respete su cultura y sus creencias. Ningún país democrático puede tolerar ataques indiscriminados en contra de su población civil.

Además, las muertes de ciudadanos palestinos causan inmenso dolor. Es necesario un entendimiento para superar el sufrimiento del pueblo de Israel y el pueblo palestino.

Exhortamos a las partes a un cese al fuego que garantice el derecho a la vida y la búsqueda de una paz de ambos pueblos.

14 de mayo de 2021