@PaolaHolguin

Mucho revuelo ha provocado la idea del expresidente Álvaro Uribe, ejecutada por el Gobernador de Antioquia, de promover una ‘vaca’ para terminar las vías 4G de Colombia que pasan por Antioquia. Recordé entonces un libro sobre liderazgo titulado: ‘La culpa es de la vaca’, el cual, a través de anécdotas y fábulas, relata cómo los seres humanos buscamos culpar a otros de nuestros errores, lo que le viene como anillo al dedo a Gustavo Petro.

Primero, afirmó que la ‘vaca’ no era necesaria, a pesar de que ha repetido hasta el cansancio que no va a poner los recursos que faltan para terminar las obras, específicamente el Tramo 2 de la Vía al Mar que es responsabilidad del Gobierno Nacional a través de Invías. Ese tramo de 19,5 km, cuesta 2 billones de pesos, incluyendo los 650 mil millones que faltan y que no están contemplados en el presupuesto.

Segundo, llama mucho la atención que al Gobierno le moleste una iniciativa ciudadana, solidaria, que nace en Antioquia para unas vías que necesita Colombia. El civismo, la solidaridad y la asociatividad, han sido características propias de los antioqueños y los colombianos. En nuestro departamento don José Gutiérrez lideró una ‘vaca’ para construir el Teatro Metropolitano y el doctor Gonzalo Mejía hizo lo mismo para hacer la Vía al Mar. Ese mismo espíritu de unidad llevó a que se crearan en Medellín la ANDI, Fenalco, la Federación Nacional de Cafeteros, Actuar, Microempresas de Antioquia, Antioquia Presente, las Cajas de Compensación, entre otras, que han servido bien al País.

Más extraño resulta que Petro haya afirmado que la ‘vaca’ es ilegal, cuando él mismo promovió una siendo Alcalde de Bogotá, a través del Decreto 532 de 2015, por el cual buscó aportes voluntarios para la financiación de proyectos sociales y de infraestructura para la Capital; o cuando promovieron la ‘vaca’ para financiar a la ‘primera línea’, que terminó asesinando Policías, quemando Comandos de Atención Inmediata (CAI), destruyendo bienes públicos y privados, y bloqueando ciudades.

Tercero, el petrismo se ha mostrado muy preocupado por la posible infiltración de recursos ilícitos en este proceso, lo que es raro porque está blindado a través de filtros de la Secretaría de Hacienda del Departamento y de Bancolombia, lo que implica todos los controles del sistema financiero; además, porque eso, poco o nada les preocupó en la campaña presidencial del Pacto Histórico, donde se ha conocido del ingreso de recursos sin reportar del Clan Torres, de Juan Carlos López alias Sobrino o de Santander Lopesierra alias El hombre Marlboro.

Cuarto, la única propuesta del Gobierno es cobrar más valorización, un proceso que toma tiempo, que implica más impuestos para asfixiar a los ciudadanos en momentos difíciles, cuando ya tenemos una economía maltrecha. Además, el punto donde faltan los recursos corresponde a Municipios con muchas dificultades.

Por último, esta es la prueba de que Petro “ni raja, ni presta el hacha”; se ha dedicado a atacar la iniciativa desde su cuenta de X (Twitter), a promover odio de clases y a estigmatizar a Antioquia. Parece que les choca mucho la solidaridad, pero en cambio, les gusta la criminalidad. Ojalá aproveche esta época Santa para la reflexión y, de paso, se una a la ‘vaca’.