
Las cosas por su nombre, sin que importe lo que cueste decirlas. La erradicación manual de los cultivos ilícitos es un crimen de Estado. Centenares de muy humildes compatriotas nuestros
Las cosas por su nombre, sin que importe lo que cueste decirlas. La erradicación manual de los cultivos ilícitos es un crimen de Estado. Centenares de muy humildes compatriotas nuestros